¿Qué es el Hipotiroidismo?

Descripción general
El hipotiroidismo es un trastorno en el cual la glándula tiroides no produce la cantidad suficiente de las hormonas: triyodotironina (T3) y tiroxina (T4), causan gran impacto en tu salud y afectan todos los aspectos de tu metabolismo.
El Hipotiroidismo es una de las entidades médicas más frecuente en consultas, constituyendo importante el conocimiento, control y manejo de la enfermedad, con el fin de evitar complicaciones futuras en los diferentes niveles de atención de salud.
Anatomía
La tiroides tiene la forma de una mariposa, de color gris rosada y está compuesta por dos lóbulos que asemejan las alas de una mariposa, un lóbulo derecho y un lóbulo izquierdo conectados por el istmo. La glándula está situada en la base del cuello a la altura de las vértebras C5 y T1, junto al cartílago tiroides, yace sobre la tráquea que rodea hasta alcanzar posteriormente al esófago y está cubierta por la musculatura pretiroidea, el músculo platisma (antiguamente llamado músculo cutáneo) del cuello, el tejido subcutáneo y la piel. Durante el proceso de la deglución, la glándula tiroides se mueve, perdiendo su relación con las vértebras.
La tiroides está recubierta por una vaina aponeurótica denominada cápsula de la glándula tiroides que ayuda a mantener la glándula en su posición. La porción más externa de la cápsula de la tiroides se continúa con la aponeurosis cervical y hacia atrás con la vaina carotídea. La glándula tiroides es recubierta en su cara anterior por los músculos infrahioideos y lateralmente por el músculo esternocleidomastoideo. Por su cara posterior, la glándula está fijada a los cartílagos tiroides y traqueal y el músculo cricofaríngeo por medio de un engrosamiento de la aponeurosis que forma el ligamento suspensorio de Berry.
Fisiología
La tiroides participa en la producción de hormonas, especialmente tiroxina (T4) y triyodotironina (T3). También puede producir (T3) inversa. Estas hormonas regulan el metabolismo basal y afectan el crecimiento y grado de funcionalidad de otros sistemas del organismo. El yodo es un componente esencial tanto para T3 como para T4.
La tiroides es controlada por el hipotálamo y la glándula pituitaria (o hipófisis).
La hormona estimulante de la tiroides (TSH) actúa sobre todos los procesos que controlan la síntesis y liberación de la hormona tiroidea, también actúa aumentando la celularidad y vascularización de la glándula.
La TSH está regulada por la concentración de hormona tiroidea libre en sangre periférica por un mecanismo de retroalimentación negativa.
¿Cómo se realiza el diagnóstico?
El diagnostico de una masa Tiroidea se hace mediante:
- Una buena historia clínica.
- Palpación bimanual o monomanual de la glándula. El médico puede pedir que se levante el mentón extendiendo el cuello y que luego trague, así se podrá distinguir una masa tiroidea de otras masas o bultos del cuello.
- Un laboratorio para evaluar la función Tiroidea.
- Una Ecografía, ya que es el método de mayor sensibilidad para el estudio de la glándula.
- Un PAAF (Punción Aspirativa con Aguja Fina).
- En algunos casos una TAC (Tomografía Axial Computada) de cuello y tórax.
Síntomas
Los signos y síntomas del hipotiroidismo varían según la gravedad de la deficiencia hormonal. Los problemas tienden a desarrollarse lentamente, a menudo durante varios años.
Al principio, los síntomas del hipotiroidismo son apenas perceptibles, como el cansancio o el aumento de peso. O simplemente puedes atribuírselos al envejecimiento. A medida que el metabolismo continúa ralentizándose, es posible que los problemas sean más evidentes.
Estos son algunos signos y síntomas del hipotiroidismo:
- Fatiga.
- Aumento de la sensibilidad al frío.
- Estreñimiento.
- Piel seca.
- Aumento de peso.
- Hinchazón de la cara.
- Infertilidad.
- Debilidad muscular.
- Nivel de colesterol en sangre elevado.
- Dolores, sensibilidad y rigidez muscular.
- Dolor, rigidez o inflamación de las articulaciones.
- Períodos menstruales irregulares o más intensos de lo normal.
- Afinamiento del cabello.
- Ritmo cardíaco lento.
- Depresión.
- Memoria deficiente.
- Glándula tiroides agrandada (bocio).
Causas
Cuando la tiroides no produce suficientes hormonas, el equilibrio de reacciones químicas en tu cuerpo puede verse afectado. Puede haber numerosas causas, entre ellas, enfermedad autoinmunitaria, tratamientos para el hipertiroidismo, radioterapia, cirugía de tiroides y ciertos medicamentos.
La tiroides es una glándula pequeña con forma de mariposa, ubicada en la base de la parte frontal del cuello, justo debajo de la nuez de Adán. Las hormonas que produce la glándula tiroides, triyodotironina (T3) y tiroxina (T4), causan gran impacto en tu salud y afectan todos los aspectos de tu metabolismo. Estas hormonas también influyen el control de las funciones vitales, como la temperatura corporal y la frecuencia cardíaca.
El hipotiroidismo surge cuando la glándula tiroides no produce la suficiente cantidad de hormonas. El hipotiroidismo puede deberse a muchos factores, por ejemplo:
-
Enfermedad autoinmune. La causa más frecuente de hipotiroidismo es un trastorno autoinmunitario conocido como tiroiditis de Hashimoto. Los trastornos autoinmunitarios ocurren cuando el sistema inmunitario produce anticuerpos que atacan tus propios tejidos. Algunas veces, este proceso involucra a la glándula tiroides.
Los científicos no están seguros de por qué sucede esto, pero probablemente sea una combinación de factores, como los genes y un desencadenante ambiental. De cualquier manera, estos anticuerpos afectan la capacidad de la tiroides de producir hormonas.
- Respuesta al tratamiento para el hipertiroidismo. Las personas que producen demasiada hormona tiroidea (hipertiroidismo) suelen recibir tratamiento con yodo radioactivo o medicamentos antitiroideos. El objetivo de estos tratamientos es normalizar la función tiroidea. Sin embargo, a veces, corregir el hipertiroidismo puede acabar disminuyendo demasiado la producción de la hormona tiroidea, lo que ocasiona un hipotiroidismo permanente.
- Cirugía de tiroides. Extirpar toda o gran parte de la glándula tiroides puede disminuir o detener la producción de hormonas. En ese caso, necesitarás consumir hormona tiroidea de por vida.
- Radioterapia. La radiación que se utiliza para tratar el cáncer de cabeza y cuello puede afectar la glándula tiroides y conducir al hipotiroidismo.
- Medicamentos. Hay un gran número de medicamentos que pueden contribuir al desarrollo del hipotiroidismo. Uno de ellos es el litio, que se utiliza para tratar ciertos trastornos psiquiátricos. Si consumes algún medicamento, pregúntale a tu médico acerca de los efectos que puede tener sobre la glándula tiroides.
Con menor frecuencia, el hipotiroidismo puede deberse a lo siguiente:
- Enfermedad congénita. Algunos bebés nacen con una glándula tiroides defectuosa o sin ella. En la mayoría de los casos, la glándula tiroides no se desarrolló de manera normal por razones desconocidas, pero algunos niños presentan una forma heredada de este trastorno. A menudo, los niños con hipotiroidismo congénito parecen normales al momento de su nacimiento. Esa es una de las razones por las que en muchos estados se piden análisis para detección de problemas de tiroides en los recién nacidos.
- Trastornos de la glándula hipófisis. Una causa relativamente rara de hipotiroidismo es la incapacidad de la glándula hipófisis para producir la cantidad necesaria de la hormona estimulante de la tiroides o tirotropina (TSH), generalmente debido a un tumor benigno de la glándula hipófisis.
- Embarazo. Algunas mujeres desarrollan hipotiroidismo durante o después del embarazo (hipotiroidismo posparto), a menudo debido a que producen anticuerpos contra su propia glándula tiroides. El hipotiroidismo no tratado aumenta el riesgo de aborto, parto prematuro y preeclampsia, un trastorno que causa un aumento significativo de la presión arterial de la mujer durante los últimos tres meses de embarazo. También puede afectar seriamente el desarrollo del feto.
- Deficiencia de yodo. El yodo, un oligoelemento que se encuentra principalmente en los mariscos, las algas, las plantas que crecen en suelos ricos en yodo y la sal yodada, es esencial para la producción de hormonas tiroideas. La deficiencia de yodo puede ocasionar hipotiroidismo, mientras que el exceso de yodo puede empeorar el hipotiroidismo en personas que ya tienen esta enfermedad. En algunas partes del mundo, la deficiencia de yodo es común, pero la adición de yodo a la sal de mesa prácticamente ha eliminado este problema.
Factores de riesgo
Si bien cualquier persona puede padecer hipotiroidismo, tienes un riesgo mayor si presentas estos factores:
- Más frecuente en mujeres.
- Si eres mayor de 60 años.
- Tienes antecedentes familiares de enfermedad tiroidea.
- Tienes una enfermedad autoinmune, como diabetes tipo 1 o enfermedad celíaca.
- Recibiste tratamiento con yodo radioactivo o con medicamentos antitiroideos.
- Recibiste radioterapia en el cuello o en la parte superior del pecho.
- Tuviste una cirugía de tiroides (tiroidectomía parcial).
- Estuviste embarazada o diste a luz en los últimos seis meses.
Complicaciones
El hipotiroidismo no tratado puede derivar en varios problemas de salud:
- Bocio. La estimulación constante de la tiroides para liberar más hormonas puede hacer que la glándula se agrande, este trastorno se conoce como bocio. Aunque por lo general no es incómodo, un bocio más grande puede afectar tu apariencia e interferir con la deglución o la respiración.
- Problemas del corazón. El hipotiroidismo también puede estar relacionado con un riesgo mayor de padecer enfermedades del corazón e insuficiencia cardíaca, principalmente debido a que pueden presentarse altos niveles de lipoproteína de baja densidad (colesterol LDL), el colesterol "malo", en personas con tiroides hipoactiva.
- Problemas de salud mental. Al inicio del hipotiroidismo, es posible que exista depresión y esta puede agravarse con el tiempo. El hipotiroidismo también puede ralentizar el funcionamiento mental.
- Neuropatía periférica. El hipotiroidismo no controlado a largo plazo puede causar daños en los nervios periféricos. Estos son los nervios que transportan información del cerebro y la médula espinal al resto del cuerpo; por ejemplo, los brazos y las piernas. La neuropatía periférica puede causar dolor, entumecimiento y hormigueo en las áreas afectadas.
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Mixedema. Este trastorno raro, y que pone en riesgo tu vida, se presenta como resultado del hipotiroidismo no diagnosticado a largo plazo. Entre los signos y síntomas del mixedema se encuentran la intolerancia intensa al frío y la somnolencia seguida de un letargo profundo y pérdida de la consciencia.
El coma hipotiroideo puede desencadenarse debido a sedantes, infecciones u otro tipo de estrés del cuerpo. Si tienes signos o síntomas de mixedema, necesitas tratamiento médico de emergencia inmediato.
- Infertilidad. Los niveles bajos de hormona tiroidea pueden interferir con la ovulación, lo que afecta la fertilidad. Además, algunas causas del hipotiroidismo, como el trastorno autoinmune, también pueden afectar la fertilidad.
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Anomalías congénitas. Los bebés de mujeres con enfermedad tiroidea no tratada pueden correr un riesgo mayor de nacer con anomalías congénitas en comparación con los bebés que nacen de mujeres saludables. A su vez, estos niños son más propensos a tener graves problemas intelectuales y del desarrollo.
Los niños con hipotiroidismo no tratado al momento de nacer corren el riesgo de tener graves problemas del desarrollo físico y mental. Sin embargo, si este trastorno se diagnostica dentro de los primeros meses de vida, las chances de desarrollarse de manera normal son excelentes.
Tratamiento
Levotiroxina es el tratamiento de elección en el hipotiroidismo, por su eficacia en resolver los signos y síntomas de hipotiroidismo, escasos efectos secundarios, larga experiencia en su uso, fácil administración, buena absorción intestinal y bajo coste.
Los objetivos del tratamiento son la resolución de los signos y síntomas, la normalización de los niveles de TSH y evitar el sobretratamiento (especialmente en ancianos).
Dosis de inicio
Debe individualizarse en función de las características del paciente (edad, peso, intensidad y etiología del hipotiroidismo, comorbilidades, embarazo o deseo gestacional). Se puede utilizar una dosis calculada (1,6 mcg/kg/día) o comenzar una dosis cercana a 100 mcg/día e ir titulando de manera progresiva.
En pacientes ancianos o con cardiopatía, se deben utilizar dosis menores (25-50 mcg/día), titulando la dosis de manera menos intensa, más espaciada en el tiempo, buscando objetivos de TSH más elevados y evitando el sobretratamiento.
Modo de administración
Se recomienda la toma de levotiroxina antes del desayuno (unos 30 minutos), ya que los alimentos pueden interferir su absorción. Igualmente algunos medicamentos como el carbonato cálcico, sulfato ferroso, algunos antiácidos y colestiramina pueden alterarla, por lo que se recomienda que se separe su administración (aproximadamente 4 horas). La administración nocturna de levotiroxina (unas 3 horas después de la cena) parece que es más eficaz (disminuye más los niveles de TSH, que la administración matutina). Esta puede ser una buena opción, en algunos pacientes con dificultad para controlar la función tiroidea o que no desean la administración matutina.
Ajuste de dosis
La mejoría en los síntomas de hipotiroidismo precisa de aproximadamente 2-3 semanas. La sintomatología del paciente no debe utilizarse para el ajuste de la dosis. La monitorización del tratamiento debe realizarse midiendo los niveles de TSH. El inicio o el cambio de tratamiento precisan de unas 4-8 semanas para observar variaciones en los niveles TSH.
En ocasiones, en la práctica clínica, nos encontramos pacientes con una dosis estable de levotiroxina que en un control analítico presentan valores elevados de TSH. En estos casos es importante insistir en el cumplimiento del tratamiento, observar variaciones ponderales, cambios en la marca de su levotiroxina habitual, así como la introducción de nuevos fármacos (que puedan alterar la absorción de levotiroxina o aumentar sus necesidades).
En otras ocasiones, observamos pacientes que precisan mayores necesidades de las esperadas de levotiroxina. Es recomendable en estos casos, descartar procesos digestivos que puedan alterar su absorción (gastritis por Helicobacter pylori, gastritis atrófica y enfermedad celíaca).
Conclusiones
El hipotiroidismo es más frecuente de lo que creemos, por eso debemos estar atentos a la clínica de los pacientes por tan mínima que sea, recordando así, un viejo refrán: “El que busca, encuentra”.
Espero que haya sido de gran utilidad para todos este artículo. Gracias.
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